lunes, 19 de marzo de 2012

Severiano Ocegueda - 74 aniversario de la expropiación petrolera en México


DEBATE Y PROPUESTA

- 18 de Marzo de 1938, HISTÓRICA JORNADA ANTIIMPERIALISTA
- AMLO, cauteloso, pero FIRME contra PRIVATIZACIÓN de PEMEX
- EVO MORALES, no se anda por las ramas


Por: Héctor Severiano Ocegueda

Con motivo del 74 ANIVERSARIO de la EXPROPIACIÓN petrolera, acaecida el 18 de MARZO de 1938 y debido a la importancia del hecho y sus mayúsculas consecuencias en la vida de México, resulta más que obligada una reflexión sobre el HISTÓRICO acontecimiento.

En su discurso alusivo a la fecha, el candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista Andrés Manuel LÓPEZ OBRADOR afirmó, CAUTELOSO como se ha mostrado los últimos tiempos, que en caso de asumir la Presidencia de México, RESPETARÍA “los contratos ya otorgados a empresas privadas nacionales y extranjeras para la exploración y explotación de campos petroleros” aclarando en la misma declaración, que se pondría PUNTO FINAL al asunto del otorgamiento de MÁS contratos de esa naturaleza, además de señalar que NO se debe PRIVATIZAR Petróleos Mexicanos (Pemex) en virtud de que aporta 850 MIL millones de pesos al PRESUPUESTO gubernamental, que NINGUNA empresa privada estaría en condiciones de aportar (Ver La Jornada. Sábado 18 de marzo de 2012) Los señalamientos del candidato presidencial de la IZQUIERDA son destacables en virtud de que de él se esperan CAMBIOS en la conducción de la principal empresa nacional, hasta ahora dirigida con los criterios de gobiernos emanados respectivamente del partido de los TRES colores y las MIL mañas y del partido de los 60 MIL muertos, mismos que se han mostrado bastante PROCLIVES a la SUBASTA de Pemex, a través de los famosos CONTRATOS a empresas privadas y han insistido desde diversos espacios y medios en impulsar la llamada “REFORMA ENERGÉTICA”.

Resulta interesante, para efectos de CONTRASTAR visiones sobre el problema del petróleo en América Latina, las FULMINANTES declaraciones efectuadas por el Presidente de Bolivia, EVO MORALES, (reproducidas por el diario argentino Página 12, este domingo 18 de marzo) quien al referirse a la PERMANENTE injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de su país, afirmó: "el capitalismo trata de pagar su enorme deuda, en el caso de los países altamente industrializados, con la apropiación del petróleo y el invento de la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico para la creación de convulsión interna planificada y organizada desde el exterior". Acto seguido y como para no dejar duda sobre su postura, señaló: "Yo quiero advertir públicamente que no tengo ningún miedo. Si otra vez la Embajada de Estados Unidos sigue molestando a Bolivia como está haciendo hasta ahora, mejor la cerramos porque somos antiimperialistas, anticapitalistas y antineoliberales". Más claro, IMPOSIBLE.

Por supuesto, se trata de DOS realidades distintas, ACÁ en México, la IZQUIERDA electoral intenta SUAVIZAR, digámoslo así, el discurso, a fin de ATRAERSE la simpatía de potenciales sectores sociales RENUENTES a una caracterización ANTIIMPERIALISTA del problema del petróleo; ALLÁ en Bolivia, un gobierno EMANADO de la MOVILIZACIÓN y la RESISTENCIA de los sectores MÁS POBRES y EXPLOTADOS, se afirma como promotor abierto de una opción ALTERNATIVA al CAPITALISMO dominante, algo en lo cual los mexicanos hace algunos años nos fuimos a la COLA en América Latina.

Sin embargo, revisado el tema de la historia de la EXPLOTACIÓN petrolera en nuestro país, NO quedan muchas dudas: Al amparo de la Ley del Petróleo expedida por el gobierno de Porfirio Díaz en 1901, estadounidenses y británicos, Edward DOHENY y CANFIELD entre los primeros y Weetman D. PEARSON, entre los segundos, emprendieron la tarea de la EXPLORACIÓN y PERFORACIÓN de pozos petroleros, con la DESMEDIDA ambición y DESDÉN por leyes y condiciones de vida de los trabajadores mexicanos, que desembocaron en el decreto expropiatorio leído el 18 de MARZO de 1938 por el Presidente Lázaro CÁRDENAS, que a la sazón provocó la IRA de empresas petroleras y gobiernos europeos y estadounidense.

Por más que le demos VUELTAS, la lucha por la DEFENSA del petróleo como PROPIEDAD de la NACIÓN y para USUFRUCTO del pueblo de México, en los términos planteados originalmente por el Artículo 27 de la Constitución General de la República, continúa siendo básica y fundamentalmente una batalla ANTIIMPERIALISTA, que, como en los tiempos de la Expropiación Petrolera de 1938, despertará ENCONADAS reacciones. Pemex arrastra una secuela de CORRUPCIÓN e INEPTITUD, pero NADA justifica los planes para DEVOLVER el petróleo mexicano a las empresas herederas de las que fueron EXPROPIADAS en 1938.

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