DESDE MI OPTICA (ALLENDE)

Arturo Camarena Flores
"¡Qué bonito es el saber!"

LA RAIZ AFRICANA EN EL MESTIZAJE DE LOS MEXICANOS

Grata impresión recibí al revisar el libro de Historia, texto gratuito (2011) de cuarto grado y leer: “Recientes investigaciones han permitido confirmar que el ser humano se originó en el continente africano y de ahí migró hacia el resto de los continentes”. Luego en las páginas 146 y 147 con el encabezado de Temas para reflexionar, se describe fielmente La vida de la población africana en Nueva España. En ese libro se comenta del origen netamente africano de dos presidentes de México: Vicente Guerrero y Lázaro Cárdenas del Río además del autonombrado Siervo de la Nación, don José María Morelos y Pavón.

Es excelente que las nuevas generaciones abran los ojos y pongan a funcionar su cerebro pues en mi lejana niñez y hasta hace pocos años en los discursos oficialistas se dijo hasta el hartazgo que el mexicano se formó de la unión entre lo español y lo indio. Deduzco que los ayuntamientos y descendencia entre indio y española fueron excepcionales dada la escasez de mujeres peninsulares y habiendo llegado, (según historiadores) dos o tres centenas de africanos con las huestes de Hernán Cortés es muy sencillo suponer en qué cuantía se inició el mestizaje. Miles de africanos fueron traídos desde Sudán, Angola y El Congo para trabajar en la minería, agricultura y otros menesteres. La maestra Luz María Martínez Montiel, investigadora de la UNAM afirma: “En 1570 estaban 6,664 españoles explotando a 20,569 africanos y a más de 3 millones de indios y dos siglos después, en 1793 había 7,904 europeos, 6,100 africanos y 2 millones 319 indios”. Analizando sin pasiones estos datos, el mestizaje tuvo que ser igual por la rama española o un poco más, (por la convivencia) de la población africana con la indígena. Desde siempre para mí no han existido castas ni raza alguna. Reconozco sólo a la especie humana. Pero en general el mexicano se queja del racismo de los originarios de los Estados Unidos pero con un racismo ramplón y rastrero también hace víctimas de su ignorancia tanto a indígenas como a sus paisanos que presentan rasgos fisonómicos similares a los nativos del Continente Africano a tal grado que es frecuente que los temidos agentes de migración hostilicen a connacionales de áreas específicas de Oaxaca y de Guerrero confundiéndolos con centroamericanos y están documentados casos de grupos de danza regional que han sido encarcelados por que según los dizque guardias, por su aspecto no son mexicanos aunque hablen español e incluso conozcan el Himno Nacional. Qué burros son. Aun siendo lo anteriormente escrito público y notorio llama la atención el ocultamiento de la negritud como tercera raíz en nuestro origen mexicano. Yanga fue un africano que logró emanciparse de la Corona Española en 1609 y conocí el pueblo que fundó con el nombre de San Lorenzo de los Negros pero ya llamado Yanga en 1965. Pasaron los años y para persistir con el predominio de lo indígena sobre el africanismo fue conurbado este municipio cercano a Córdoba, Veracruz y hoy es Cuitláhuac. Qué listos se creen las autoridades. Nadie que haya visto las colosales cabezas olmecas en La Venta, Tabasco o incluso sus fotografías puede dudar que su fisonomía sea netamente africana y cuya herencia está en los vocablos chamuco, bemba, cambujo, chirudo, chamba y Mocambo entre otros. ¿A poco usted es jacarandoso, bailador de cumbias y otros ritmos tropicales, consumidor de moronga y de menudo debido a su herencia indígena? Por supuesto que no. SOMOS AFORTUNADAMENTE ASÍ POR NUESTRA TERCERA RAÍZ, LA AFRICANA.

arturocamarena1@hotmail.com
Miembro de la Asociación de Periodistas y Escritores de Nayarit, A C.(APENAC)