Severiano Ocegueda - Transporte público urbano, ¿fuera de la ley?

TRANSPORTE PÚBLICO URBANO, ¿FUERA DE LA LEY?

- Permisionarios, alérgicos al diálogo
- Ley de Tránsito, LETRA MUERTA
- Modernización, urgente

Por: Héctor Severiano Ocegueda

FERNANDO RODRÍGUEZ, el polémico dirigente de la desfalleciente ACASPEN, la histórica alianza de camioneros que surgió como el BRAZO priista en el sector transportista, ha declarado que está dispuesto a respetar la LEY en materia de tarifas de cobro a ESTUDIANTES, personas de la TERCERA EDAD y DISCAPACITADOS, que señala que estos usuarios pagarán el 50 por ciento de la tarifa general por el servicio del transporte público urbano.

En estricto sentido no podemos desperdiciar la valiosa oportunidad que el señor Rodríguez nos brinda para preguntar POR QUÉ razones la Ley es LETRA MUERTA en el terreno del TRANSPORTE PÚBLICO URBANO sin lograr comprender cómo es que ello sucede, si por ACUERDOS extralegales con las autoridades o por INCAPACIDAD gubernamental para hacerla cumplir; y ya que el líder muestra disposición de dialogar acerca del asunto de la legalidad y hace referencia al artículo 149, fracción VI, de la Ley de Tránsito del Estado de Nayarit (relativa a los cobros a los sectores mencionados) la ocasión es más que propicia para tomarle la palabra y profundizar en el tema.

La mencionada Ley señala en su artículo 8, que son autoridades de tránsito y transporte, entre otros, la COMISIÓN TÉCNICA del TRANSPORTE y que en la materia existirá un PLAN RECTOR del SISTEMA de TRANSPORTE PÚBLICO. En la Ley se definen los conceptos fundamentales de VIALIDAD, los protagonistas (gobierno, usuarios y permisionarios), sus DERECHOS y OBLIGACIONES.

Por ejemplo, en la Ley se afirma, Artículo 14 que son facultades de la Comisión Técnica del Transporte I.- Elaborar y mantener actualizado el Plan Rector del Sistema de Transporte Público para el Estado de Nayarit, así como los manuales y normas técnicas que en materia de capacidad, seguridad y eficiencia, deberán satisfacer los vehículos destinados a la prestación del servicio público. Para tales efectos, recogerá la opinión de los usuarios, cámaras de servicio, organizaciones sociales y permisionarios; II.- Elaborar los dictámenes técnicos que se relacionen con: a).- Otorgamiento, modificación, revocación o transmisión de permisos para el servicio público de transporte en sus respectivas modalidades; b).- Otorgamiento, modificación o revocación respecto a autorizaciones de ruta, itinerarios, horarios, paraderos, sitios, bases de operación, terminales, y estacionamientos públicos o pensión de vehículos; c).- Fijación de tarifas para el servicio público de transporte urbano, estacionamiento y pensión de vehículos, y d).- Las demás que le encomiende el Titular del Poder Ejecutivo”. Hasta aquí por ahora.

De manera que debe haber una Comisión Técnica, que elabora y actualiza el Plan Rector del Transporte y manuales y normas técnicas para la SEGURIDAD y EFICIENCIA; realiza dictámenes TÉCNICOS e interviene activamente en la elaboración de RUTAS, ITINERARIOS, HORARIOS, PARADEROS, bases de operación y terminales, entre otras actividades. Además, artículo 21, queda PROHIBIDO a los conductores de vehículos circular a velocidades mayores de 40 kilómetros por hora en avenidas con señalamiento específico, 30 kilómetros por hora en el perímetro de zona urbana y 10 kilómetros por hora en zonas de circulación intensa de seres humanos como oficinas, ESCUELAS, unidades deportivas, HOSPITALES e iglesias. Igual que hubo un “Góber Precioso”, aquí tenemos una ley PRECIOSA.

Seguridad, eficiencia, comodidad y tarifas accesibles para TODOS los USUARIOS, son características de un servicio de transporte público urbano digno. Un servicio así desde luego significa una mejor CALIDAD de VIDA de los habitantes de una ciudad. Los argumentos basados en la INCOSTEABILIDAD del servicio pueden y deben ser atendidos y TIENEN SOLUCIÓN.

Es claro que un buen comienzo, en medio de la BARBARIE cotidiana en la que vivimos, sería LEER la Ley de Tránsito del Estado de Nayarit, de esa manera los ciudadanos tendríamos mayores argumentos para RECLAMAR, las autoridades más cuidado en su CUMPLIMIENTO y los PERMISIONARIOS mayor atención.

La experiencia nacional e internacional en materia de MODERNIZACIÓN del transporte público urbano apunta en el sentido de que la mejora sustancial de este INHIBE el uso EXCESIVO del automóvil particular, disminuye significativamente los ACCIDENTES viales y los niveles de CONTAMINACIÓN ambiental. Claro que para ello se requiere en primer lugar VOLUNTAD POLÍTICA y deseo de resolver un problema, el de la MOVILIDAD URBANA, cada vez más COMPLEJO.

Vaya desde aquí un DOBLE saludo, a los jóvenes y ciudadanos en general que mantienen la lucha por la mejora del transporte público urbano y a los AGENTES (hombres y mujeres del Departamento de Tránsito) que a diario les toca bailar con la más FEA: la BARBARIE urbana.